Durante la segunda mitad de abril se experimentó una alta volatilidad en los dólares alternativos, situación que según diversas consultoras privadas, generó presiones en los precios y elevó las expectativas de inflación para ese mes.
Se estima que la inflación habría alcanzado al menos un 7%, aunque algunos análisis la sitúan en niveles cercanos al 7,7% de marzo e incluso cerca del 8%. Además, las distintas encuestas realizadas por estas consultoras destacaron el marcado incremento en los precios de los alimentos, que superaron nuevamente el nivel general de inflación.
Según explicó el jefe de Research en Ecolatina, Santiago Manoukian, el aumento en los dólares alternativos se verá reflejado en el índice de precios de abril: "Calculamos un aumento del 6% en los precios de 6.000 bienes durables en la última semana".
Por otro lado, el IPC de la Fundación Libertad y Progreso registró un aumento del 7,2% mensual en abril (frente al 7,3% en marzo). "A pesar de la desaceleración en comparación con el mes anterior, hay que tener en cuenta que marzo está fuertemente condicionado por el factor estacional, lo que establece un piso más alto para ese mes, y en consecuencia, en general se observa una desaceleración en abril, aunque no es el caso en este momento", explicaron desde la firma.
El rubro de alimentos y bebidas no alcohólicas subió un 8%, según las consultoras. La dinámica inflacionaria de las últimas dos semanas de abril mostró una tendencia alcista, en parte influenciada por la corrida cambiaria, lo que provocó fuertes incrementos en los precios de los bienes no regulados. El impacto completo de este fenómeno se observará con mayor intensidad en mayo, según las consultoras.