El 26 de marzo se conmemoró el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino, lo que es una oportunidad para hablar de esta afección, promover los cuidados y controles, claves en su prevención.
“Es un cáncer que afecta mucho a las mujeres, es el tercer cáncer de incidencia en Argentina, segundo cáncer ginecológico luego del cáncer de mama con 4.000 casos al año”, comentó María Eugenia Montivero, quien está a cargo de consultorio de patologías cervical del programa de Prevención del cáncer cervicouterino del Ministerio de Salud.
La médica instó seguir el calendario de vacunación para el virus del HPV. “El cáncer de cuello es producido por el virus papiloma Humano que se contagia por contacto sexual. Tenemos que colocar la vacuna a los niños y niñas de 11 a 14 años”. Luego, una vez iniciada la actividad sexual en la persona, recomendó hacerse una vez por año el Papanicolaou, ya que “detecta lesiones precancerosas y a tiempo se puede prevenir que se desarrolle el cáncer”.
El VPH se transmite por contacto sexual y es la causa más frecuente de enfermedades de transmisión sexual en mujeres y varones en todo el mundo. Si bien la mayoría de las veces el organismo logra eliminar el virus sin haber generado síntomas, cuando se prolonga la infección de un virus de alto riesgo, pueden originarse distintos tipos de cáncer, principalmente el de cuello uterino.
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