Hoy Brasil espera una definición histórica. Es que se está llevando adelante el ballotage que definirá quién será el próximo presidente del país vecino entre los candidatos Luiz Inácio Lula Da Silva y Jair Bolsonaro. Esta instancia se generó luego de que en primera vuelta Da Silva ganara en votos (48,31%) pero no con la diferencia suficiente como para evitar esta segunda vuelta contra Bolsonaro, que en aquella oportunidad obtuvo el 43,30%.
Las urnas estarán abiertas hasta las 17, momento en que iniciará el conteo, pero desde el Tribunal Supremo Electoral (TSE) aclararon que se les permitirá votar a todos aquellos que se encuentren en la fila a la hora del cierre de las urnas. A partir de las 18 se empezarán a conocer los resultados parciales mientras que se estima que los finales se sabrán a partir de las 20.
Incidentes y polémicas
Como con cada evento de importancia en cualquier parte del mundo, las redes sociales, principalmente Twitter, suelen ser el informativo del minuto a minuto de los acontecimientos.
Desde el inicio de los comicios, a las 8 del domingo, Lula y Bolsonaro fueron de las principales tendencias junto a los distintos hashtags utilizados para el ballotage. Pero al pasar las horas una nueva tendencia se sumó a la lista: "golpe de estado".
¿Qué pasó? Según lo que anotician diferentes medios, la Policía Rodoviaria detuvo varios colectivos en el que se transportaban votantes hacia la Región Nordeste. Los mismos habrían sido interceptados ante la duda de que fueran "votantes pagos". Desde la línea bolsonarista aseguran esta teoría y remarcan la ilegalidad de la cuestión. Mientras que los seguidores de Lula afirman que quisieron evitar que esas personas lleguen a votar sabiendo que se trata de una zona de gran apoyo al candidato presidencial por el Partido de los Trabajadores, y de allí que surja la acusación de un golpe de estado.