Al frío de la temporada invernal se le suma el uso de equipos y métodos de calefacción que, de no usarlos correctamente, pueden traer complicaciones a la salud. Una de esas complicaciones es la intoxicación por inhalación de monóxido de carbono.
El monóxido de carbono (CO) es un gas inodoro, incoloro y tóxico que puede causar enfermedad y muerte repentina si se encuentra en una concentración lo suficientemente alta en el aire del ambiente, según información de la página de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Desde el Ministerio de Salud de la Nación indicaron que el monóxido de carbono es un gas muy tóxico para las personas y los animales e ingresa al organismo a través de los pulmones y desde allí pasa a la sangre, ocupando el lugar del oxígeno.
Este gas reduce la capacidad para transportar oxígeno de la sangre y hace que las células no puedan utilizar el oxígeno que les llega. Posee además cuatro características: no tiene olor, no tiene color, no tiene sabor y no irrita los ojos ni la nariz.
¿Qué artefactos producen monóxido de carbono?
Cualquiera que utilice material combustible (gas, petróleo, carbón, kerosén, nafta, madera, plásticos) puede producir monóxido de carbono cuando se quema en forma incompleta:
- Calefones, termotanques, calderas
- Estufas, braseros, salamandras
- Cocinas, anafes, calentadores, parrillas a leña o carbón, hornos a gas o leña
- Motores de combustión (vehículos, motosierras, generadores eléctricos, etc).
¿Cómo prevenir la intoxicación por monóxido de carbono?
Evacuar correctamente los gases al exterior, ya que esto evitará la acumulación de gases tóxicos en el interior de las viviendas. Además de controlar la instalación y el buen funcionamiento de los artefactos:
- Mantener los ambientes bien ventilados
- Si se encienden brasas o llamas de cualquier tipo, no dormir con éstas encendidas. Siempre apagarlas fuera de la casa.
- No usar el horno u hornallas de la cocina para calefaccionar el ambiente.
- No mantener recipientes con agua sobre la estufa, cocina u otra fuente de calor.
- El calefón no debe estar en el baño, ni en espacios cerrados o mal ventilados.
- No encender motores a combustión (grupos electrógenos, motosierra, etc.) en ambientes cerrados, en sótanos o garajes.
Si se inhaló monóxido de carbono, ¿cuáles son los síntomas que podrán esperarse?
Algunos de los síntomas pueden ser dolor de cabeza, mareos, somnolencia, debilidad, cansancio, náuseas o vómitos, pérdida del conocimiento y/o convulsiones, palpitaciones, dolor de pecho y paro cardiorrespiratorio.
Si se presentan signos de intoxicación, se deben abrir puertas y ventanas para ventilar, retirarse o retirar a la víctima del lugar contaminado para respirar aire fresco, llevar a la víctima rápidamente al Hospital, o al Centro asistencial más próximo aunque haya recuperado el conocimiento. Allí informar al equipo de salud sobre el antecedente de exposición a gases de combustión.