Durante la presentación, la Ministra Ávila resaltó la importancia de la participación de la comunidad en el Programa Hilando Redes. "Brindamos el material, recurso humano y capacitación necesaria para que la comunidad tome la posta, porque la salud mental es una tarea de todos. Nuestro equipo de salud mental ha crecido en conocimientos y territorialmente" señaló. Además, destacó la presencia de profesionales en salud mental en diferentes puntos de la provincia, como La Ciénaga, Villa Vil, Londres, Corral Quemado y Pozo de Piedra.
Por su parte, la Secretaria de Salud Mental y Adicciones, Tamara Franco, subrayó la importancia de fortalecer y mejorar la red de atención de salud mental. "Estamos trabajando en replantear nuestras prácticas, con todo el abordaje que implica pensar en la salud mental. Por eso son importantes estas capacitaciones y tener una continuidad" expresó. Asimismo, resaltó la creación de un espacio intersectorial de trabajo para agilizar y avanzar en cuestiones relevantes.
El Programa Hilando Redes se enlaza con las políticas sanitarias de la provincia y busca mejorar el acceso a la salud mental para todos los catamarqueños. Este programa unifica varias estrategias de la Secretaría de Salud Mental y Adicciones con el objetivo de establecer y fortalecer la red de servicios especializados, no especializados y comunitarios en el campo de la Salud Mental. Esto se alinea con la Ley Nacional Nº 26.657 de Protección de la Salud Mental y el Plan Nacional de Salud Mental.
El equipo de Salud se enfoca en la educación popular y la construcción colectiva para eliminar los estigmas asociados a los trastornos de salud mental. Esto permitirá que los usuarios sean atendidos en su propia comunidad, conservando sus vínculos familiares y sociales, y garantizando la continuidad de los servicios. Asimismo, se busca organizar los servicios en redes que articulen la promoción, prevención, tratamiento y rehabilitación de la Salud Mental y las Adicciones.
Desde el Ministerio de Salud, se considera que la Salud Mental es un derecho que el Estado debe garantizar. Se reconoce que es un fenómeno complejo determinado por diversos factores, y por lo tanto, requiere un abordaje dinámico, interdisciplinario e intersectorial que respete los derechos humanos de las personas.
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