La insignia fue creada en el año 1812, por pedido de Manuel Belgrano, durante el período del Primer Triunvirato en las Provincias Unidas del Río de la Plata. Su propósito principal era unificar los colores del ejército argentino, permitiendo distinguirse de los enemigos y promoviendo así la unidad nacional.
La escarapela se creó para ser llevada en el lado izquierdo del pecho en fechas relacionadas con su creación, como el 18 de febrero, así como durante toda la Semana de Mayo, que abarca del 18 al 25. También es común lucirla en días festivos nacionales como el Día de la Bandera, que se celebra el 20 de junio, y el Día de la Independencia, que tiene lugar el 9 de julio.
La escarapela es un símbolo de identidad y patriotismo para todas y todos los argentinos, que lleva a rememorar la historia del país y la lucha por la independencia.