Aunque no fue un partido perfecto de River, ya que en el medio se le complicó y hasta pudo haber perdido la ventaja, sí que pegó en los momentos justos: en el arranque, con un penal que Lucas Beltrán mandó a guardar (fue su quinto gol en los últimos cuatro partidos), y a la mitad del segundo tiempo, cuando Sarmiento se le estaba yendo al humo y Agustín Palavecino intervino para agrandar la diferencia.
Con este triunfo, el tercero al hilo por el campeonato, River llegó a los 18 puntos y quedó como líder en soledad. Claro que este lunes, cuando visite a Newell's, San Lorenzo podrá recuperar ese lugar.