El calor fue el caldo de cultivo del enojo que puso fin a la paciencia.
No se puede estar en aulas sin ventilador, con paredes electrificadas (cuando no hay huecos de durlock totalmente partidos) y en algunos casos, sin bancos donde sentarse.
Las condiciones en las escuelas públicas son angustiantes, a tal punto que bastó que un grupo de estudiantes se animaran a cortar una calle para que los días que siguieron, se volcaran en cadena decenas de estudiantes secundarios en distintos puntos de la provincia.
Según manifiestan los directivos, los relevamientos de las roturas se realizan todos los años y de forma contínua. Pero tanto el Ministerio de Educación como el área de Infraestructura Escolar priorizan las obras donde las clases peligran, y el resto puede esperar indefinidamente.
Los que pueden, dictan clases afuera. Los que no, hacen media jornada. Cada directivo resuelve como puede la falta absoluta de inversión y cuidado de las aulas.
“No podemos esperar a tener algún herido para poner cartas en el asunto. Nosotros no nos callamos más. Son más de 10 años de reclamos, promesas que nunca cumplieron, notas que llegaron a Dirección y que fueron tiradas”, acusan los alumnos de la EPET Nº 7.
Los alumnos de la Escuela Secundaria Nº 5 Gobernador Galíndez tienen clase en el patio. “Después de la lluvia las paredes quedaron con humedad. Ayer hubo un cortocircuito”, declararon ante los medios. Esta mañana, cortaron el ingreso a la rotonda de OSEP.
En tanto que los estudiantes y toda la comunidad educativa de la Escuela Secundaria Nº 6 Juan Chelemín informaron que de no tener respuestas favorables por parte del Ministerio de Educación, continuarán con los cortes desde el próximo lunes.
Por redes sociales, circula un flyer convocando a un reclamo masivo de estudiantes en protesta por las pésimas condiciones edilicias de las escuelas. Será el próximo miércoles, en la Plaza principal de Catamarca.
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