A diferencia de la suba de diciembre, que se aplicó en los primeros días del mes, en el Año Nuevo el incremento del 4% sería a partir de la segunda quincena (desde el 15 de enero en adelante). Este año por primera vez el gasoil pasó a ser más caro que la nafta.
El acuerdo entre el Gobierno y las refinadoras, que implicó el ingreso de los combustibles a Precios Justos, también contiene compromisos de aumentos del 4% en febrero y de 3,8% en marzo, para un total de 16,8% en el cuatrimestre diciembre-marzo.
A cambio, el Gobierno no hará la suba prevista de los impuestos a los combustibles este 1 de enero y la postergó hasta el 1 de abril de 2023, tras lo acordado en el Decreto 864/2022
Según fuentes de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), la pérdida de la recaudación en los impuestos a los combustibles es "multimillonaria".
“Debe tenerse en cuenta que tratándose de impuestos al consumo, y dado que la demanda de los combustibles líquidos es altamente inelástica, las variaciones en los impuestos se trasladan en forma prácticamente directa a los precios finales de los combustibles”, explicó la medida, publicada en el Boletín Oficial.