La publicación se está viralizando en Facebook, a poco menos de una semana de anunciado el listado de preadjudicación para 200 viviendas en Valle Chico.
La usuaria aclara que es licenciada en Trabajo Social y pertenece al equipo técnico que realiza las evaluaciones de quines se inscriben en el IPV.
“Hoy siento vergüenza e impotencia con lo acontecido en el último listado de preadjudicación, que en gran parte carece de la requerida evaluación de acuerdo a la necesidad/urgencia habitacional”, inicia en su descargo.
La trabajadora asegura que ni ella ni el equipo técnico de trabajadores sociales del IPV fueron parte del proceso de pre adjudicación, y que su ejercicio profesional fue “prácticamente anulado'' en este último proceso.
“Me quedo con la impotencia de observar y encontrarme con que hay más de 120 casos sin visitas sociales, informes sociales negativos, postulantes que de acuerdo a sistemas serían propietarios de vivienda o terrenos, beneficiarios de soluciones habitacionales, entre otras irregularidades. Solteros adjudicatarios, ¿cuál es el criterio de selección?”, se pregunta.
“Hoy tenemos un listado de preadjudicación sin actualizaciones, hasta adjudicatarios con inscripciones recientes de hasta 3 meses. Ni hablar de los casos prioritarios críticos y/o de discapacidad elevados por trabajadoras sociales del área para ser considerados en las adjudicaciones que aún siguen en espera”.
“Vergüenza total e impotencia por aquellas familias que todavía sueñan con su casa propia”, concluye.
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