Tiempo Libre

Piñón Fijo contó cómo fue el funeral "surrealista" de su madre catamarqueña en La Paz

El payaso manifestó que fue una experiencia muy "García Márquez".
Por Pablo Perez

El carismático payaso cordobés Piñón Fijo posee una larga trayectoria por la que se ganó el corazón del público infantil, e incluso adulto, a lo largo y ancho del país. Su nombre verdadero es Fabián Alberto Gómez, el 20 de agosto va a cumplir 57 años y es oriundo de Deán Funes.

Su nombre deriva del engranaje que es parte de la bicicleta, y se desempeña como actor, cantautor y conductor de televisión. Sin embargo, su vida personal es muy hermética, pero en una entrevista en Caja Negra, de Filo News, compartió varias anécdotas de su vida, pero la más dura y "surrealista" (según sus palabras), fue la que vivió en nuestra provincia, específicamente en San Antonio de La Paz con el funeral de su madre catamarqueña.

“Me han pasado cosas, como a todo ser humano. Imagínate, en 32 años (de carrera). Pero siempre he tenido esa esa ductilidad de transformar las supuestas tristezas en aprendizaje. Y en redoblar la apuesta. Cuando falleció mi mamá, ya venía mal la cosa. Yo me tenía que ir de gira a la Patagonia y el médico me dijo: ‘Mirá, andá de gira porque esto es un período de cosas que puede durar un día o tres años’. Y me pasó que tuve que tomar la decisión e irme”, expresó Piñón.

Viajó a hacer la gira, y realizó su show en el Día de la Madre. “Subí al escenario, hice el show y cuando bajé vi la mirada de mi productor de ese momento y me di cuenta de que había sucedido”, indicó.

Volvió a Córdoba, se encontró con su hija Sol, también artista, quien le preguntó qué iban a hacer con el cuerpo de su abuela. Fabián le explicó que iban a cremarla, pero Solcito Fijo le dijo "la abuela nunca quiso eso, ¿te acordás cuando yo me quedaba a dormir con la abuela?, me decía que lo único que no quería era eso. '¿Y qué quería la abuela?' (le preguntó Piñon). Y ella quería estar con sus hermanos en San Antonio de La Paz, en el pueblo donde nació", le respondió.

“Recalculando. Salir a buscar féretros, combi para llevar eso, combi para la familia. Y nos fuimos a San Antonio de la Paz, un pueblito muy chiquitito de Catamarca donde nació mi mamá”.

Piñón Fijo

La experiencia fue muy García Márquez porque salimos con el cajón de la iglesia a pata hasta el cementerio, por las calles de tierra. Y vos sabés que pasó una cosa muy hermosa esa vez, dentro de todo lo trágico, porque yo obviamente estaba de Fabián, pero todo el mundo sabía que yo era Piñón. Yo iba con el cajón de mi vieja, venían los chicos. ‘¿Usted es Piñón? ¿Le puedo dar un beso?’ Sí, bueno, y le daba un beso. Y dale que va”, manifestó en Caja Negra.

El payaso contó que su mamá era la menor de 11 hermanos, la nena mimada, la joyita de unos sirio-libanés muy conservadores."Mi papá le escribía cartas a mi mamá y se la mandaba con un señor, con un muchacho de esa época. Le golpeaba la ventanita a mi mamá, le daba una carta. Y así fue la relación amorosa el primer año. Ese señor se llama Mundo”, recordó.

“Bueno, yo iba ahí, beso por acá, alguien que se acercaba, ‘yo lo veo siempre por la tele’. En un momento ya la cosa estaba medio fastidiosa. Y viene un señor así, grande, morocho, morocho, morocho, muy oscuro de piel. Le digo: ‘Sí, maestro, ¿qué pasa?’ Yo soy Mundo, el que le lleva las cartas de su padre a su madre. El momento fue surrealista, te juro. Después me di vuelta para buscarlo y no estaba más”, expresó.

En un aniversario del fallecimiento de su madre, le escribió una canción a Mundo, pero la perdió. “La tengo que recuperar, en algún lado tiene que estar. Era una carta a Mundo, pero con doble sentido. Era ese hombre pero también al mundo. La voy a rescatar”, aseguró.