La historia de la mítica fábrica de pastas "Giovannina" inicia allá por los años 40'. Silvana Piolanti y Atilio Brunello son dos inmigrantes italianos que llegaron a la provincia por separado y en Catamarca se enamoraron, producto de ese amor nació su único hijo, Roberto, quién hace 22 años y en honor a sus raíces fundó la empresa familiar.
El local se encuentra ubicado en la esquina céntrica de Prado y Rivadavia, y está ambientado con un estilo italiano e imágenes de la familia, atiende de martes a domingo por el mediodía y desde la vereda se puede sentir una aroma atrapante.