Laura García, representante del Colectivo Feminista de Catamarca, habló a instancias de los alegatos que se están llevando a cabo en el juicio contra Elpidio Guaraz.
Dijo que muchas mujeres de diferentes colectivos y procedencias se acercaron hasta la Cámara Penal Nª 2 para “acompañar a la sobreviviente de los abusos de Guaraz”.
“Entendemos que hoy debe haber una sentencia y que debe ser ejemplar porque esta causa tiene mucho de lo cultural, de lo nuestro de Catamarca y de las formas de actuar que hay no solamente en el interior, porque recordemos que Elpidio Guaraz fue 4 veces intendente de Bañado de Ovanta, sino que es de toda la sociedad”, sostuvo.
“No tenemos que pedirles valentía a nuestras adolescentes, lo que tenemos que empezar a pedir como sociedad es que estas situaciones no existan más y esto es lo que le pedimos hoy al Tribunal que lo está juzgando”.
Feminista Laura García
Esto, expresó, tiene que ver con el poder político o económico que ostentan determinadas personas y por el “que creen que todo les pertenece, incluso las niñeces, las adolescencias y las mujeres. Y así obran y así actúan”.
“En este caso, recordemos que él ya iba por su segundo mandato como intendente, un hombre de casi 60 años, con muchísimo poder económico y político. Y hablamos de una adolescente menor de edad, que estaba en la escuela secundaria que era humilde, pobre de una familia que no tenía trabajo, entonces no podemos jamás pensar que ahí hay una relación o una pareja. No hay una paridad no hay una semejanza”, analizó.
“Tienen que empezar a cambiar quienes pertenecen al poder político. Tienen que empezar a cambiar estas lógicas. No pueden estas personas perpetrarse en el poder, ni seguir en el poder incluso después de una denuncia de este tenor”.
Laura García, colectivo feminista.
García remarcó las “asimetrías” que caracterizan al caso en las que “hay dos realidades totalmente distintas”. Y en las que el acusado "utiliza todos los recursos del Estado, que tiene que estar para garantizar salud, educación, trabajo, seguridad, para su propio bien y para abusar en este caso de esta adolescente”.
Pidió que la sentencia no sólo sea ejemplificadora en la cantidad de años, sino también “que ordene a la sociedad, que sea reparadora para la sociedad: “No podemos permitir que esto se repita sistemáticamente. No nos olvidemos del caso de Enrique Aybar, que es exactamente lo mismo, utilizando los recursos del Estado, becas para engañar a las niñas, engañar a las adolescentes, cometer abusos de poder, abuso sexual, violencias de las más tremendas que se puedan imaginar. No podemos permitir ni legitimar esto como sociedad”.
Por último, dijo que la Justicia marcaría un precedente al expedirse con perspectiva de género.
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