La Cámara de Diputados trató y aprobó el proyecto de Inhabilidades Constitucionales para el Ejercicio de la Función Pública de autoría del bloque del Frente de Todos y que es una iniciativa similar al presentado por el diputado radical, Tiago Puente, denominado Ficha Limpia.
El encargado de fundamentar la iniciativa fue el diputado Augusto Barros (FT) quien recordó que anteriormente “la sentencia firme era el requisito o impedimento para la función pública” pero que luego de “distintos fallos que fueron haciendo jurisprudencia” agregaron “la cuestión de la idoneidad y después apareció la doble instancia”.
Respecto al proyecto original que se había presentado, Barros afirmó que el mismo ponía topes a quienes deseaban ser candidatos a legisladores y aseguró que este Poder “es el que menos denuncia de corrupción tiene, ya que, no tienen manejo de fondos”.
En este sentido, señaló que se debe ser “más serios” respecto a estos proyectos por lo cual, destacó que “tenemos que prevenir en todos los poderes. Ninguna provincia incluyó en la inhabilidad los otros poderes del Estado pero nosotros, que queremos ser un poco más serios, cuando hablamos de inhabilidad hablamos de todos los aspectos de la vida e incluimos el Ejecutivo, la Justicia, Municipios y organismos descentralizados”
Por su parte, el diputado Tiago Puente (UCR) manifestó que celebra que por fin se trate la Ficha Limpia en la Cámara de Diputados, y sostuvo que “no hay duda que este proyecto tiene la finalidad que impulsa un movimiento ciudadano que emprendió en las calles garantizar representantes que se encuentren a la altura de los representados”. Sin embargo, aclaró que "esta iniciativa no es obra del diputado Puente, ni del oficialismo, sino de la ciudadanía”
Puente además replicó al cuestionamiento de Barros y afirmó que “tildar a Ficha Limpia de poco serio o de tener fines electorales es faltarle el respeto al compromiso democrático de este movimiento. Ficha Limpia es una auténtica política pública”.
En esta misma línea, cuestionó también al oficialismo por no querer tratar ambos proyectos en forma conjunta, y explicó que esto evita la construcción de consenso. Para cerrar, afirmó: "por fin escuchemos la demanda de la sociedad que nos pide que le pongamos un freno a la erosión de las instituciones".
Por otro lado, Hugo Ávila (FUP), tras coincidir en que el proyecto representa “un paso adelante”, aprovechó también para apuntar contra el oficialismo y acusó un “proceso de colonización del Poder Judicial”, poniendo en duda que los nuevos miembros de la Justicia sancionen a funcionarios del oficialismo en algún proceso judicial.
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