En un acto de valentía, la madre de una joven estudiante ha decidido hablar con INFORAMA para visibilizar un caso de abuso sexual y solicitar justicia. La denuncia, involucra a un empleado de YMAD acusado de abusar de una estudiante de la Tecnicatura en Higiene y Seguridad durante su práctica profesional en la mina.
La estudiante, junto a sus compañeras, cursaba el tercer año de la tecnicatura en el Instituto Fasta cuando, en septiembre de 2023, se trasladaron a la Minera YMAD en Belén para realizar sus prácticas.
Al llegar, fueron recibidas "por un jefe de área" quien durante los siete días de estadía, las acoso verbalmente y abuso de ellas. El hombre de unos 50 años, empleado de la minera, las sometió a insinuaciones sexuales inapropiadas y eventualmente, a abusos físicos.
Cuando esté hombre se fue de franco y otro supervisor lo reemplazo, las jóvenes tuvieron el valor de hacer pública la situación.
Tras denunciar estos hechos ante otro supervisor, el área de recursos humanos organizó un careo entre las estudiantes y el acusado, quien desestimó las acusaciones alegando que no se podía "decir un piropo a las mujeres, porque salían con mentiras y que si seguían mintiendo corría riesgo de perder su trabajo". Posteriormente, a esta situación de re victimización, se les solicitó redactar un informe escrito y sin más explicaciones, fueron enviadas de regreso a la capital.
La madre de la joven, tras encontrarse con su hija, buscó respuestas en la institución educativa y el rector les brindó una audiencia. Previamente por pedido del padre de la menor, fue la autoridad del Instituto Fasta quien había solicitado que las estudiantes regresaran de inmediato a la capital. Luego, realizó la denuncia formal en la Unidad Judicial número 4, pero la causa no avanzó.
Sin bajar los brazos a esta lucha, la madre de la joven se presentó en YMAD y fue atendida por un abogado quien dijo que era la primera vez que se denunciaba este tipo de situaciones y que los empleados estaban suspendidos.
Al pasar el tiempo y seguir sin respuesta, la familia de la víctima, busco el patrocinio de un abogado, el Dr. Gustavo Rentin, quien consiguió una reunión con las autoridades de YMAD.
En esa reunión, la familia tuvo el compromiso del Fernando Jalil, director de la minera en ese momento, de tomar cartas en el asunto, de investigar la situación, aunque minimizaron el careo ilegal llevado adelante por los empleados, pero se comprometieron a suspender las prácticas profesionales hasta que se resuelva la situación.
Sin embargo, la causa no avanza y la semana pasada, fue noticia en los medios de comunicación que iniciaron las prácticas de estudiantes en la Minera. Está situación llevo a que la madre de la víctima, haga público su pedido de justicia:
Afirmó que “en este tiempo supieron que el caso no es aislado; se ha sabido que el empleado implicado tiene antecedentes de conductas similares, pero los jóvenes no quieren denunciar por miedo a no poder recibirse".
El pedido de la familia es claro: justicia y garantías de que tales actos no se repitan. Es imperativo que se tomen medidas concretas para proteger a los estudiantes de todo el país y de distintas edades que acuden a la minera para su formación profesional.